Detuvieron al hijo de la pareja de productores asesinada en Andresito
Se trata de Alejandro Kirschner, joven de 23 años que vivía con el matrimonio. La medida fue ordenada por el titular del Juzgado de Instrucción Tres de Puerto Iguazú, Martín Brites, y se concretó en la vía pública poco después de las 14.30, detallaron fuentes ligadas al caso consultadas. “Esto no quiere decir que el caso está resuelto y no seguiremos investigando”, señaló un vocero consultado.
Los investigadores pusieron desde un principio la lupa sobre el testimonio de Alejandro, quien expresó haberlos encontrado sin vida en su casa el domingo 22, poco después de la medianoche La hipótesis que emergió al principio fue que se trató de un asalto ya que los delincuentes habían revuelto toda la casa, aunque con el correr de las horas la pesquisa viró a una disputa familiar. Sobre este punto, hay un detalle que llama la atención: la única habitación que no estaba revuelta es la del sospechoso.
Sobre este punto, los familiares de las expresaron que el lugar no había grandes sumas de dinero y que los dividendos de su trabajo eran depositados en el banco. Sus cuerpos estaban en la habitación matrimonial. El hombre estaba boca abajo sobre la cama y la mujer en el piso, boca arriba. En la escena fueron incautadas tres vainas servidas de un arma de calibre 22 largo y un trozo de madera. También había cajas de esas municiones, por lo que los investigadores consideran el arma que les dio muerte a las víctimas era de su propiedad.
En la camioneta de la familia también había sangre, que sería del ahora detenido. Este manifestó que su perro lo mordió horas antes y el médico policial confirmó que las lesiones que tenían eran producto del ataque de un animal. Sobre las necropsias, el informe preliminar que recibió el juez Martín Brites confirmó la saña con la que actuaron los delincuentes.
Mirta Sakcer (54) fue la más castigada, ya que si bien se confirmó que falleció por un balazo en la cabeza -tenía otro impacto en el abdomen-, también presentaba una fractura de cráneo, causada por un objeto contundente. Su marido, en tanto, falleció a causa de dos balazos en la cabeza. Por otro lado, la semana pasada se concretaron dos allanamientos en busca del arma homicida y el celular de la víctima en lugares señalados como kioscos narco o ligados al narcomenudeo, donde podrían haberse vendido estos elementos.
Foto Policia de Misiones
Los investigadores pusieron desde un principio la lupa sobre el testimonio de Alejandro, quien expresó haberlos encontrado sin vida en su casa el domingo 22, poco después de la medianoche La hipótesis que emergió al principio fue que se trató de un asalto ya que los delincuentes habían revuelto toda la casa, aunque con el correr de las horas la pesquisa viró a una disputa familiar. Sobre este punto, hay un detalle que llama la atención: la única habitación que no estaba revuelta es la del sospechoso.
Sobre este punto, los familiares de las expresaron que el lugar no había grandes sumas de dinero y que los dividendos de su trabajo eran depositados en el banco. Sus cuerpos estaban en la habitación matrimonial. El hombre estaba boca abajo sobre la cama y la mujer en el piso, boca arriba. En la escena fueron incautadas tres vainas servidas de un arma de calibre 22 largo y un trozo de madera. También había cajas de esas municiones, por lo que los investigadores consideran el arma que les dio muerte a las víctimas era de su propiedad.
En la camioneta de la familia también había sangre, que sería del ahora detenido. Este manifestó que su perro lo mordió horas antes y el médico policial confirmó que las lesiones que tenían eran producto del ataque de un animal. Sobre las necropsias, el informe preliminar que recibió el juez Martín Brites confirmó la saña con la que actuaron los delincuentes.
Mirta Sakcer (54) fue la más castigada, ya que si bien se confirmó que falleció por un balazo en la cabeza -tenía otro impacto en el abdomen-, también presentaba una fractura de cráneo, causada por un objeto contundente. Su marido, en tanto, falleció a causa de dos balazos en la cabeza. Por otro lado, la semana pasada se concretaron dos allanamientos en busca del arma homicida y el celular de la víctima en lugares señalados como kioscos narco o ligados al narcomenudeo, donde podrían haberse vendido estos elementos.
El resultado sobre estos elementos fue negativo, pero los investigadores terminaron descubriendo otra cosa que llamó mucho la atención. Se trató del teléfono celular del propio Alejandro Kirschner, quien había dicho que lo había perdido en la Fiesta del Agricultor -realizada el 6, 7 y 8 de septiembre pasados- y no lo tenía.
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